Un innovador estudio realizado por investigadores de la Universidad RMIT de Australia y diversas instituciones de la India ha revelado un prometedor medicamento a base de oro que podría transformar el tratamiento del cáncer. El compuesto ha demostrado una impresionante capacidad para frenar el crecimiento de tumores en animales en un 82%, mostrando una efectividad mucho mayor que los tratamientos de quimioterapia convencionales.
Publicado en el European Journal of Medicinal Chemistry, este estudio presenta un nuevo compuesto de oro que es 27 veces más potente contra las células de cáncer cervical que el conocido medicamento de quimioterapia cisplatino. Además, en entornos de laboratorio, ha mostrado ser 3.5 veces más eficaz contra el cáncer de próstata y 7.5 veces más eficaz contra el fibrosarcoma.
Superando la Quimioterapia
Los estudios realizados en ratones revelaron resultados sorprendentes. El compuesto de oro no solo superó al cisplatino, sino que lo hizo de manera dramática, reduciendo el crecimiento de los tumores de cáncer cervical en un 82% en comparación con el 29% logrado con cisplatino. Este avance es crucial para el desarrollo de alternativas más eficaces a las terapias tradicionales basadas en platino.
El Profesor Distinguido Suresh Bhargava AM, quien lideró el proyecto en la Universidad RMIT, destacó que este descubrimiento podría llevar a tratamientos contra el cáncer más seguros y efectivos. Las propiedades únicas del oro lo hacen ideal para aplicaciones médicas, ya que es un metal altamente estable e inerte, lo que explica su uso en joyería y monedas. Sin embargo, el compuesto utilizado en este estudio es una versión especialmente diseñada para ser reactiva y biológicamente activa.
Modo de Acción del Compuesto de Oro
El compuesto de oro desarrollado en este estudio interactúa específicamente con una enzima llamada tioredoxina reductasa, presente en grandes cantidades en las células cancerosas. Al inhibir la acción de esta enzima, el compuesto interrumpe la multiplicación de las células cancerígenas, lo que previene el desarrollo de resistencia al medicamento, un desafío común en los tratamientos contra el cáncer. Este enfoque selectivo permite que el tratamiento actúe de manera más precisa, minimizando los efectos secundarios tóxicos que suelen estar asociados con los fármacos basados en platino, como el cisplatino, que afecta tanto a células cancerígenas como a células saludables.
La estabilidad del oro en este compuesto permite que llegue intacto a los sitios tumorales, lo que aumenta aún más su eficacia. Esta selectividad, junto con una menor toxicidad sistémica, sugiere un futuro para las terapias contra el cáncer que no solo sean más eficaces, sino también mucho menos dañinas para los pacientes.
Inhibición de la Creación de Nuevas Vasos Sanguíneos
Otra característica importante de este compuesto de oro es su capacidad para inhibir la formación de nuevos vasos sanguíneos, un proceso conocido como anti-angiogénesis, que los tumores necesitan para crecer. Esta acción dual fue probada en peces cebra y ha mostrado ser efectiva contra varios tipos de células cancerosas, incluidas las células de cáncer de ovario, que suelen ser difíciles de tratar y pueden desarrollar resistencia al cisplatino.
La Profesora Distinguida Magdalena Plebanski, co-líder del proyecto, subrayó la relevancia de este descubrimiento: «La resistencia a los medicamentos es un obstáculo significativo en la terapia contra el cáncer. La alta eficacia de nuestro compuesto de oro contra las células de cáncer de ovario es un paso crucial para combatir los cánceres recurrentes y las metástasis.»
El Oro en la Medicina
El potencial terapéutico del oro no es nuevo. Durante siglos, se ha utilizado en prácticas de la medicina tradicional india, como en la Ayurveda, por sus propiedades curativas. Hoy en día, con el creciente apoyo de la investigación científica, los tratamientos contra el cáncer basados en oro están ganando atención en todo el mundo. Un ejemplo de esto es la reutilización del medicamento anti-artrítico auranofina, que actualmente está siendo explorado en ensayos clínicos para su aplicación en la lucha contra el cáncer.
Este avance representa un paso significativo en la búsqueda de tratamientos menos invasivos y más efectivos para los pacientes con cáncer. Aunque todavía se encuentra en etapas experimentales, la promesa de los compuestos de oro para tratar diversas formas de cáncer, desde el cervical hasta el de ovario, podría ofrecer nuevas esperanzas para quienes enfrentan esta enfermedad devastadora.